EXCÉLSIOR
Agentes desalojaron un campamento de varios cientos de venezolanos que se encontraban a orillas del río Bravo, en Ciudad Juárez, Chihuahua. En la acción, extranjeros incendiaron varias carpas.
Los migrantes fueron forzados a trasladarse a varios albergues, por lo que muchos huyeron al municipio y otros se entregaron a la Border Patrol texana.
El ayuntamiento de Juárez aseguró que “fueron cerca de 500 migrantes trasladados a los diferentes albergues de la ciudad”, pero cientos de ellos huyeron al límite fronterizo y se entregaron a la patrulla fronteriza y otros más se escondieron en calles.
El gobierno anunció que el operativo de desalojo y traslado, a primeras horas de ayer, se realizó “con la intención de resguardar la integridad de los venezolanos que se encontraban asentados en la orilla del río Bravo”.
Un informe detalla que “70 aceptaron ser llevados a los albergues, 58 al Leona Vicario y 12 al Oasis del Migrante”.
El desalojo se dio atendiendo condiciones de salubridad y seguridad, y ante “la posibilidad de incendio e incluso ahogamiento por la presencia del río Bravo, sumado a la baja de temperaturas que se vive en la ciudad”, destacó el secretario del ayuntamiento, Héctor Ortiz.