REDACCIÓN / NOSOTROS MX
La rectora de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), Tania Rodríguez Mora, reiteró hoy ante legisladores del Congreso capitalino su solicitud de 1,586, millones 81 mil 47.84 pesos, para poder contar con un monto apegado al costo real de la universidad.
En un encuentro virtual, y en el marco de la aprobación del paquete presupuestal para el ejercicio 2021, tras de haber entregado un informe a los diputados, dijo que su propuesta es para tener un presupuesto «ajustado a la situación de la ciudad y del país», sin pasar por alto el ejercicio de austeridad correspondiente.
«En la UACM no tenemos una burocracia dorada, ni gastos o lujos –dijo–. El planteamiento de nuestra lógica presupuestal es muy cuidadosa, atendiendo señalamientos claros a los que hay que responder sobre la eficiencia del gasto».
Acerca de la experiencia durante 2020, Rodríguez Mora aseguró que en materia académica había «gran preocupación» por la posibilidad de que la pandemia ocasionara gran deserción de estudiantes. Sin embargo, para contrarrestar los efectos perniciosos del golpe que representa, se ha mantenido la matrícula y trabajando a distancia. «Para conseguirlo se dieron apoyos extraordinarios como tabletas y servicios de internet residencial, apuntalado esto con un seguimiento puntual en línea sobre la asistencia a los grupos», comentó.
Gracias a la reorientación presupuestal se logró apoyar con el préstamo de 3,734 tabletas para que puedan continuar con las actividades académicas del semestre 2020-11 en las modalidades híbridas; la disposición de 1,952 conexiones de internet residencial para quienes no cuenten con posibilidades de acceso; el otorgamiento de 958 renovaciones de becas para estudio de licenciatura y 700 nuevas becas, con flexibilización de los requisitos para su obtención; el otorgamiento de 77 becas para cursar y la implementación de 44 apoyos para el mismo número de estudiantes en condición de vulnerabilidad por discapacidad y por condición socioeconómica, mencionó.
«Nuestro mejor indicador es que los alumnos están en sus salones. En febrero se tendrán resultados al terminar el semestre. Por su flexibilidad y características, nuestro modelo de certificación de conocimiento pudo responder muy bien frente a esta crisis», subrayó.
Al corte del 31 de octubre de 2020, el número de estudiantes que obtuvieron su certificado de terminación de estudios fue de 4,320 (en el 2020, y pese al confinamiento, se emitieron 227 certificados). El Certificado de Terminación de Estudios se obtiene una vez que el estudiante ha validado la certificación del 100 por ciento de créditos del Plan de Estudios de su carrera, y además se han validado los documentos de sus estudios anteriores (bachillerato). Al cumplir estos requisitos, el Certificado de Terminación de Estudios no sólo es un certificado de término del plan de estudios, sino la antesala de la titulación. Actualmente, hay 2,193 estudiantes con el cien por ciento de créditos.
La rectora informó además que existen seis denuncias en curso sobre el uso de los recursos de la institución, y destacó el compromiso de la administración y el Consejo Universitario en materia de rendición de cuentas con el fortalecimiento de Unidad de Transparencia, la Contraloría General y haber solventado la mayoría de las 70 observaciones realizadas por la Auditoría.
«Estamos en un momento muy importante en que, como comunidad, nos planteamos de forma sistemática que no vamos a permitir que en la UACM el dinero no estuviera claro. Queremos cuentas claras», puntualizó.
Destacó el programa en materia de inclusión, el cual impulsa la UACM, entre los que destacan el Programa de Educación Superior para Centros de Readaptación Social (Pescer) y los programas Letras Habladas (para personas con discapacidad visual) y Letras Señadas (discapacidad auditiva). Finalmente, dijo que en los próximos días la Comisión de Planeación de la UACM aprobará el Programa Integral de Desarrollo (PIDE), marco general de trabajo que «pone nuestras aspiraciones como universidad, las cuales tenemos que ser capaces de convertirlas en indicadores». En este documento se planifican los siguientes 20 años de vida institucional. ♦